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300g
Si no es posible usar una bañera, ¡las sales de baño se pueden usar en la ducha!
Promueven la relajación, ayudan a aliviar el estrés y pueden ayudar a hidratar y exfoliar la piel.
Contiene sal rosa fina del Himalaya y tiene propiedades hidratantes. El romero también tiene propiedades antioxidantes, ya que es rico en compuestos oxidantes que ayudan a neutralizar los radicales libres. También tiene propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas.
También contiene sulfato de magnesio, conocido como sal de Epsom. Es un compuesto mineral natural con varios beneficios para la salud, como el alivio del dolor muscular, la relajación y la mejora del tono de la piel, aclarando la piel y regulando el equilibrio electrolítico del cuerpo, lo que beneficia la función muscular y nerviosa.
Enriquecido con aceite esencial de lavanda, promueve la relajación y reduce el estrés. El aceite esencial de lavanda también tiene propiedades curativas, antiinflamatorias y analgésicas. También es eficaz para combatir la ansiedad y el insomnio.
Cómo usar en la ducha:
1 - Moja tu cuerpo con agua tibia. La temperatura ideal es de entre 37 °C y 38 °C para relajar los músculos y mejorar la circulación.
2 - Aplique una pequeña cantidad de sales en la mano o en una esponja de baño.
3 - Masajee suavemente el cuerpo con movimientos circulares, prestando atención a las zonas con mayor tensión muscular.
4 - Enjuague
5 - Aplique crema hidratante.
El agua tibia y la sal del Himalaya forman una solución iónica que ayuda a eliminar toxinas a través de la piel, relajar músculos y articulaciones, y aportar minerales esenciales al cuerpo.
Tiempo de uso recomendado: 15 a 20 minutos
